EINSTEIN SOBRE LOS MEANDROS
El distinguido físico
Alberto Einstein, premio Nobel de Física en 1921, escribió en 1926 un artículo sobre el origen de
los meandros.1
Es poco conocido que su hijo Hans Einstein,
que desarrolló la fórmula de transporte de sedimentos
que lleva su nombre,2
comenzó su carrera no en la ingeniería hidráulica,
sino en la ingeniería estructural.
Alberto Einstein tenía un gran interés en los meandros,
y le debió haber recomendado a su hijo que
incursionara en la hidráulica fluvial. Años despues,
a mediados del siglo XX, Hans Einstein se convirtió en
uno de los pilares del naciente campo de
la ingeniería de transporte de sedimentos.
La discusión de Alberto Einstein sobre el origen de los meandros es característicamente profunda.
Su atribución de que las corrientes secundarias se deben a la aceleración de Coriolis
debe haber estado entre las primeras. Su explicación acerca de cómo
los meandros se forman debido a un balance entre las fuerzas de inercia y las de fricción
en una dirección perpendicular al flujo es magistral.
A la fecha todavía no se conoce con exactitud el proceso, pero una cosa es muy cierta: Las enseñanzas de Einstein
nos han ayudado a desentrañar el misterio
de los meandros.
1 Einstein, A., 1926.
The cause of the formation of meanders in
the courses of rivers and of the so-called Baer's Law.
Read before the Prussian Academy, January 7, 1926. Published in Die Naturwissenschaften, Vol. 14. [English translation in "Ideas and Opinions,"
by Albert Einstein, Modern Library, 1994].
2 Einstein, H. A., 1950. "The bed-load function for sediment transportation in open channel flows." USDA
Soil Conservation Service, Technical Bulletin No. 1026, Washington, D.C., September.
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